“Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros, Y hemos contemplado su gloria: Gloria como del Unigénito del Padre, lleno de gracia y de Verdad” (Jn 1, 14; Evangelio del día de la Natividad del Señor)
Queridos Congregantes, aspirantes y simpatizantes, y cuantos os asomáis a conocernos, ¡Que estos días sean para todos ocasión de penetrar en el misterio de la Encarnación: el Verbo de Dios, hecho hombre, asume la naturaleza humana, la rescata y la eleva hasta la intimidad de la Bienaventurada y gozosa Trinidad! ¡Que no cese nuestra acción de gracias a Nuestra Madre Santísima! ¡Pidámosle que nos ponga a todos junta a ella, en la contemplación amorosa de su Hijo! A todos, y especialmente a quienes podáis estar en tiempo de cruz, ¡Feliz y Santa Navidad!
Ad Iesum per Mariam